¿Y Que Hay De Mi?
A medida que avanzamos en nuestro diario vivir, existe una vocecita en nuestra mente que siempre cuestiona: “¿Y qué hay de mí?”. Tal vez algo como: “¿Cuándo llegará mi turno de que me tomen en cuenta en el trabajo?” o “¿Cuándo alguien de esta familia hará algo por mí?”. Esa voz puede estar susurrándote sobre tus finanzas, tu trabajo o tus amigos, pero siempre te anima a pensar en algo que no tienes. Y, lamentablemente, las redes sociales y la cultura en general nos llevan a centrarnos en el concepto de felicidad y éxito de este mundo, pero ¿funciona?
¿Podrías estar saboteando tu propia alegría, tu propósito, tu éxito? ¿Qué podrías hacer para salir de tu propio camino? Y lo más importante, ¿cuál es la definición de éxito de Dios? La Biblia nos dice, una y otra vez, que la verdadera fuente de significado y felicidad es una vida centrada en Dios y en servir a los demás. En lugar de preguntarnos cuándo será nuestro turno de conseguir un aumento, ser reconocidos o finalmente triunfar, es hora de descubrir la fuente de la felicidad y la satisfacción verdaderas y duraderas.
¡Al transitar por esta ruta, tendremos mayor gozo y una relación más cercana con Dios de lo que jamás podríamos imaginar!